Conducía mi coche esta mañana por una autovía cuando encontré sobre la calzada el cuerpo devastado de un gato. Pocos metros después otro. Uno y otro, producto del paso de coches y camiones sobre sus cadáveres, habían ido perdiendo volumen hasta terminar por aplanarse de tal modo que, es probable, que en unas horas sea imperceptible su difunta existencia. Miles de animales mueren cada día atropellados en las carreteras. ¿Son estas de asfalto o son cúmulos de cuerpos animales muertos?
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