- España consolida con el beneplácito de las grandes empresas de comunicación el sistema bipartidista (PP - PSOE). Las inmensas minorías quedan excluidas y su aportación ideológica ninguneada. Se ruega cambio urgente en la ley electoral pensada para los tiempos de gobierno de la UCD y el contento del nacionalismo "periférico".
- Medios de Comunicación: el gremio de periodistas se humilla y acepta condiciones inaceptables para cualquier profesional con un mínimo de dignidad profesional. De las ruedas de prensa de "no se admiten preguntas" al debate con periodista marioneta. Los despliegues de previo y post, más dignos de la farándula futbolera, denigran la seriedad (¿?) de lo político y la fiabilidad del periodista.
- Un debate no es una confrontación de monólogos, es una exposición de ideas que se contraponen y contrastan. Y a poder ser ideas basadas en datos ciertos.
- Zapatero demostró ser una persona con muy poca cualificación. Blando, dubitativo, incapaz de responder a preguntas concretas del candidato Rajoy. La misma tibieza con la que ha presidido el país en muchos momentos de su legislatura presidencial.
- Rajoy debe confiar en la falta de memoria del ciudadano. Su propuesta es extrema derecha pura y dura. Su insistencia en la inmigración (propia de Le Pen y otros especímenes) y su descalificación continua hacia Zapatero le inhabilitan (si es que no lo estaba ya). La acusación de "agresión a las víctimas" lamentable. En baloncesto, técnica descalificante.
- ¿Quién ganó el debate? ¿Rajoy o Zapatero? ¿Es eso todo lo que se debe extraer de un debate? Convertir un debate en un combate excluye la valoración de ideas. En el boxeo ganó Rajoy, en las ideas perdieron ambos.
- Medios de Comunicación: el gremio de periodistas se humilla y acepta condiciones inaceptables para cualquier profesional con un mínimo de dignidad profesional. De las ruedas de prensa de "no se admiten preguntas" al debate con periodista marioneta. Los despliegues de previo y post, más dignos de la farándula futbolera, denigran la seriedad (¿?) de lo político y la fiabilidad del periodista.
- Un debate no es una confrontación de monólogos, es una exposición de ideas que se contraponen y contrastan. Y a poder ser ideas basadas en datos ciertos.
- Zapatero demostró ser una persona con muy poca cualificación. Blando, dubitativo, incapaz de responder a preguntas concretas del candidato Rajoy. La misma tibieza con la que ha presidido el país en muchos momentos de su legislatura presidencial.
- Rajoy debe confiar en la falta de memoria del ciudadano. Su propuesta es extrema derecha pura y dura. Su insistencia en la inmigración (propia de Le Pen y otros especímenes) y su descalificación continua hacia Zapatero le inhabilitan (si es que no lo estaba ya). La acusación de "agresión a las víctimas" lamentable. En baloncesto, técnica descalificante.
- ¿Quién ganó el debate? ¿Rajoy o Zapatero? ¿Es eso todo lo que se debe extraer de un debate? Convertir un debate en un combate excluye la valoración de ideas. En el boxeo ganó Rajoy, en las ideas perdieron ambos.
2 comentarios:
¡Aleluya! Doy gracias al Monstruo de Spaghetti Volador porque, por primera vez en las 12 horas que llevo despierto, encuentro a alguien que opina del debate sin posicionarse a favor de ZP, digo, de uno de los candidatos.
Hoy por la mañana me han comido la figura por afirmar que Zapatero, antes las críticas de Rajoy sobre su gestión como presidente, lejos de defender su actuación se dedicó a responder con críticas a los anteriores gobiernos del PP.
Coincidirás conmigo en las pocas aptitudes de ambos candidatos para el debate. Siguiendo tu símil baloncestístico, con la cantidad de puntos flacos que dejaron sus blandas defensas (en zona) apenas se atrevieron a penetrar y doblar. Más bien se dedicaron a hacer su manoletina y tirar sus triplitos. Aún así estoy de acuerdo contigo en mucho de lo que dices, incluido que a los puntos ganó Rajoy.
Pero lo peor no es que los candidatos sean ineptos para el debate. Lo peor de todo es que, en este país en el que la mediocridad triunfa y te lleva a ser cabeza de partido, nuestro próximo Gobierno, sea del color que sea, será un Gobierno mediocre. Mediocre con honores.
Tenemos un gobierno mediocre (más) garantizado.
Es desolador el panorama político/informativo de este país.
No reconocer el patético papel de Zapatero por muy antiPP que se sea y por los muchos motivos que el PP se encarga de darnos para no votar (en vida... muerto, ya veremos)es digno de los palmeros que rodean a este tipo de personajes. ¿Por qué tanto miedo a reconocerlo? ¿Tan voluble es el voto?
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