Ay, ay, ay. ¡Qué duro es el deporte! Si es que no se puede pretender ir a correr después de jugar un partido de baloncesto en Brasil. Por cierto, de veinte a las lituanas. Eso sí, espero que no se den cuenta que mi cuerpo peina por si les da por impugnar.
He vuelto a la carretera. Bueno, más bien a las aceras. Después de una intensa reclusión y de relacionarme con el mundo exterior por webcam vengo ahora de corretear por ahí. Y digo yo, ¿no se podría acordar el cuerpo de que eso ya lo solía hacer antes? Porque mira que se le olvida al cabrón. Así que mañana ración de agujas p´al cuerpo.
En fin, que me he puesto otra vez en marcha más que nada porque mi chica vuelve a casa (como el turrón por Navidad) en breve. Y no es cuestión de fracasar en el recibimiento. A ver si me entiendes. No se trata de muscular el cuerpo en una semana (con baterflay master del universo plus) sino de... ¿me se entiende, no? No vaya a ser que se atasque el gato (no Garfi, no va por ti).
He vuelto a la carretera. Bueno, más bien a las aceras. Después de una intensa reclusión y de relacionarme con el mundo exterior por webcam vengo ahora de corretear por ahí. Y digo yo, ¿no se podría acordar el cuerpo de que eso ya lo solía hacer antes? Porque mira que se le olvida al cabrón. Así que mañana ración de agujas p´al cuerpo.
En fin, que me he puesto otra vez en marcha más que nada porque mi chica vuelve a casa (como el turrón por Navidad) en breve. Y no es cuestión de fracasar en el recibimiento. A ver si me entiendes. No se trata de muscular el cuerpo en una semana (con baterflay master del universo plus) sino de... ¿me se entiende, no? No vaya a ser que se atasque el gato (no Garfi, no va por ti).
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