Tras la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se decidió dar vía libre al proyecto de Parque Temático de la Dictadura propuesto por el dictador que, de esta manera, evitó la apertura de un proceso judicial en su contra por supuestos delitos contra los derechos humanos. En contrapartida los países miembros del Consejo de Seguridad podrán alcanzar mayores acuerdos con el país que preside el dictador para incrementar el control sobre los pozos petrolíferos (en la actualidad sólo el 20% de los pozos están gestionados por empresas de otros países). El acuerdo alcanzado entre el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y el dictador permitirá incrementar los derechos de la población de su país que, hasta ahora, vivía bajo el yugo implacable de una fuerte represión denunciada por las organizaciones pro-derechos humanos y que desde la entrada en vigor de este pacto podrá decidir entre continuar con su modo de vida tradicional dentro del Parque Temático de la Dictadura o firmar contratos con las empresas extranjeras que controlarán hasta un máximo de un 65% de los pozos del llamado oro negro. Dichos contratos incluirán una ración diaria de pan y vino a cambio de los Derechos de descendencia familiar por el que los hijos de los firmantes del contrato nacidos a partir de la fecha de entrada en vigor del acuerdo serán enviados al primer mundo para satisfacer las demandas de adopción de numerosas parejas que esperan poder así ver satisfechas sus necesidades afectivas.
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